Estando en el Planeta
Valencia y tras una semana de fallas una servidora no ha podido evitar reflexionar
sobre lo que ha visto en las calles y ha leído estos días sobre estas polémicas
fiestas. Cada día hay más detractores de las fiestas josefinas y la verdad es
que sus razones tienen con calles cortadas, transportes públicos reubicados y
pachangueo mezclado con canciones de Extremoduro y Mago de Oz de hace 12 años.
Pero, al contrario de los detractores de las fallas, yo no creo que el problema
sean las fiestas en sí, creo que el problema somos las personas. Somos las
personas cuando olvidamos el respeto a los demás, la tolerancia y la educación,
cuando nos creemos el ombligo del mundo y que, tal y como predica una marca de
cerveza “Lo tuyo es mejor”. Pensando un poco en que no me hacen falta 300
metros cuadrados de barracón o la gran cantidad de empleo que se genera creo
que nos iría bastante mejor. Mientras, yo seguiré comiéndome la cabeza de cómo
el ser humano tiene capacidad para ir conociendo el origen del universo pero no
para convivir con el que tiene a su vera.